El enojo es una emoción básica que todos los seres humanos tenemos. Y cuando estamos en ella lo único que queremos es tener razón. Te pasó más de una vez ¿no? Igual que a mí, igual que a todos, pero ¿cuáles son las consecuencias de tener razón? ¿Es sano para nosotros ésto? ¡Invito a todos los amigos lectores de La Fogata Radio a leer esta nota y que lo descubramos juntos!

No vamos a negar que a todos nos da cierta (al menos esporádica) satisfacción tener razón. ¿Cuántas veces nos descubrimos exclamando: «¿viste? ¡Yo te dije!»? O incluso comentándonos eso a nosotros mismos. Algunos dicen que alimenta el ego. Tal vez así sea, pero… ¿cuál es el precio que pagamos por tener razón?

En una discusión o durante un enojo nos empeñamos en exponer y sostener con fuerza nuestro punto de vista, nuestras interpretaciones y motivos para hacer o decir lo que sea que hicimos o dijimos antes de comenzar a discutir. Nos justificamos. Nos defendemos como si de una real batalla se tratara. Buscamos a toda costa «simplemente tener razón», a todo precio, a capa y espada, contra viento y marea y no podemos ver ninguna otra cosa más que nuestro único objetivo de tener razón.

He sido una persona bastante enojona y bastante fanática de tener razón y un día me pregunté: ¿Para qué tener razón? ¿De qué nos sirve? ¿Nos lleva tener razón al resultado que queremos?

Volvamos a la discusión o al enojo. En general lo que queremos es dejar de discutir. Arreglar las cosas. Llegar a un acuerdo. Pero si nos olvidamos de lo que queremos y ponemos el foco en tener razón ¡seguramente vamos a tenerla! Obtenemos lo que enfocamos. Donde está tu atención está tu energía.

¿Y dónde queda la idea de arreglar las cosas? ¿Del acuerdo y/o el consenso? En otro lugar muy lejano, muchas veces cada vez más lejano y difícil de alcanzar.

Qué pasaría si antes de emprender esta intensa búsqueda de tener razón nos empezáramos a preguntar: ¿Dónde está mi compromiso? ¿Con tener razón o con el resultado que busco? ¿Quiero tener razón o generar un acuerdo?

¿Y si desde ahí armáramos nuestra conversación de forma muy distinta?

Te invito a reflexionar esto antes que quizá sea tarde y, por comprometernos con tener razón, quizá destruyamos nuestros vínculos más queridos. Antes de llegar, quizás, a no poder recuperar una preciada relación por querer tener razón. Antes que elegir nuestro efímero placer de tener razón, quizá nos impida elegir ser felices. Quizás y sólo quizás.

Si sentís que éste es tu momento ¡Te invito a que tengas tu primera entrevista virtual de 15 minutos y descubras cómo el Coaching te puede acompañar!

✍🏻 Lic. Mariana Gometz
Coach de Desarrollo Personal

📧 e-mail
💻 Web
📸 Instagram 
👤 Facebook 
📺 YouTube

¡L@s espero! Son tod@s bienvenid@s.

SEGUÍ A LA FOGATA RADIO Y OPINÁ EN TODAS NUESTRAS REDES
📸 Instagram 👤 Facebook 🐤 Twitter 📽  YouTube